Para M...

Cuanta locura la de esos días
de risas compartidas,
de inoportunas despedidas,
cuantas noches reprimidas.
Tantas fueron las salidas,
los balcones de madrugadas aprobadas
y de sabanas limpias.
Bailando “Princesa”
reíamos de aquel año
que poco a poco dejo nuestras manos.
De la plaza recuerdos marchitos
fueron el decorado de aquel asilo
de paredes amarillas
con retratos vacíos,
de alacenas fumigadas
y alimentos prohibidos.
No hizo efecto la pastilla del olvido,
el insomnio distraído
lastimaba con hastío
a mentes devoradas por el tiempo perdido.
Pero al final
los sueños traen doctores que dan pena
por sus huesos apolillados,
queridos ojos verdes
anatomía del pasado.
Latidos lisos
como de un partido no jugado,
paso en una llamada
algún día de verano.

Maldita mi memoria
maldita letra M
que se dibuja en su nombre
que me recuerda su mal amor.


Octubre, 2006.